La especie humana es emocional, social y vincular, porque somos mamíferos (nacemos dependientes biológicamente) y comunitarios (la madre de la cría vive asociada a una comunidad, formada por relaciones de parentesco que generalmente, pertenecen a un grupo social mayor llamado tribu, pueblo, nación y que se vincula afectivamente de forma especial a determinadas personas o grupos).
Podemos hablar de necesidades humanas, incluso cuando esta terminología tenía peor
prensa (López, 2008)
En la Psicología clásica, hubo autores que propusieron diferentes teorías sobre las necesidades universales de la especie humana, pero el dominio de las teorías conductistas, ambientalistas y contextuales llevó a la mayor parte de los psicólogos a criticar y olvidar estos planteamientos, con la excepción de algunas corrientes marginadas como la psicología humanista (Masloww, 1968), el psicoanálisis a su manera, ha mantenido un discurso sobre la naturaleza humana, la etología humana y la teoría del apego (Bowlby, 1969). También la escuela de Ginebra mantuvo la idea de que existen invariantes funcionales, como características propias de la especie.
Pero poco a poco, las posturas ambientalistas y el conductismo radical, ha tenido que reconocer que las características de la especie imponen ciertas reglas, ciertas condiciones, fuera de las cuales la vida o el desarrollo adecuado de los individuos corren grandes riesgos. No se puede vivir en cualquier ambiente , comer cualquier cosa o por referirnos a nuestro campo, vivir sin los cuidados de algunos adultos y sentirse bien sin vincularse a los demás de diferentes formas.
La propuesta en la que nos basaremos es la que elabora Félix López.
"Cuando hablamos de necesidades queremos decir que el niño o niña es un proyecto que para cumplirse necesita de determinadascondiciones, que en definitiva, necesita unas cosas y no otras.
Estas necesidades son de naturaleza biológica y social y deben ser consideradas como características de la especie humana.
Por ejemplo, es innegable que todo ser humano necesita vincularse afectivamente a los demás para sentirse seguro y satisfecho emocionalmente.
La siguiente clasificación que se expone a continuación es la propuesta de este autor:
a) Necesidades de carácter físico-biológico:
-Ser planificado y nacer en un momento biológico y social adecuado de la madre y el padre.
-Alimentación.
-Temperatura.
-Higiene.
-Sueño.
-Actividad física (ejercicio y juego).
-Integridad física.
-Protección de riesgos reales.
-Ambiente ecológico saludable.
-Salud.
Estas necesidades se asientan en un hecho básico: somos un cuerpo orgánico con vida y determinadas características biofisiológicas.
b) Necesidades mentales y culturales:
-Estimulación sensorial.
-Exploración física y social.
-Conocimiento de la realidad física y social.
-Reconocimiento de derechos y deberes.
-Conocimientos sociales.
-Adquisición de un sistema de valores y normas.
-Adquisición de saberes escolares y profesionales.
-Interpretación positiva del mundo, el ser humano y sentido de la vida.
Sabemos que la necesidad de estimulación es ampliamente conocida por todos los especialistas.
En los tiempos de vigilia, los bebes deben ser estimulados, especialmente cuando ellos mismos se muestran activos, tiempo de vigilia que va en aumento de mes a mes. Esto es necesario para el desarrollo del cerebro en su conjunto, para los sentidos y el cuerpo en general.
c) Necesidades emocionales y afectivas
-Necesidad de seguridad emocional, protección y base de exploración, afecto, estima y cuidados eficaces, fortaleciendo el vínculo de apego.
-Afectos sexuales del deseo, atracción, enamoramiento, initimidad, apego y los cuidados entre iguales.
Desde el punto de vista de las emociones, es necesario aprender a expresar, comprender, compartir, regular, controlar y usar bien las emociones. Todas las emociones son útiles, dando significado a las cosas, los sucesos y las relaciones.
La verdadera inteligencia emocional, debe cumplir las condiciones indicadas que acabamos de señalar: comprender, expresar y compartir: nos permite ser empáticos (tener en cuenta el punto de vista de los demás, conectar emocionalmente y consolarlos o alegrarnos con ellos) y provocar la empatía de los demás.
Usar bien las emociones significa que hemos aprendido a expresar lo que queremos, en términos socialmente aceptables y de manera eficaz. Para ello debemos usar el conocimiento social, nuestras capacidades empáticas y el autocontrol emocional.
d) La necesidad de participación y autonomía progresiva
Los niños son actores dentro del sistema familiar, educativo y social en general. Tienen el derecho y la necesidad de participar en las decisiones y situaciones en las que estén implicados en la medida de sus posibilidades.
Es en la participación real donde se construye la verdadera ciudadanía. "
